viernes 11 de marzo de 2011
La Magdalena acoge un simposio internacional con 400 profesionales en el que se debaten los últimos avances
MARIANA CORES mcores@eldiariomontanes.es
Luis Pérez Carro lleva 21 años practicando la técnica artroscópica. Durante este tiempo ha combinado su labor como médico de Valdecilla (últimamente como adjunto al Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología) con la cirugía deportiva en su consulta privada. Con los años se ha especializado en la cirugía artroscópica (a través de la medicina privada), sobre todo en la cadera, que supone un menor coste y recuperación más rápida para el paciente. Acaba de pedir una excedencia de dos años del Servicio Cántabro de Salud (SCS) para dedicarlos a la enseñanza y, a la vez, a la formación. Hoy. se clausura en el Palacio de la Magdalena el III Simposio Internacional de Cirugía Ortopédica y Traumatología, que ha reunido a 400 profesionales y 30 ponentes de una decena de países que han debatido sobre los últimos avances del sector.
-Usted es uno de los grandes defensores de la artroscopia, pero esta técnica apenas se desarrolla en el SCS...
-Se trata de una técnica de aprendizaje que lleva tiempo. Hay que formarse en el extranjero, pero para ello hay que controlar el inglés y ésta es una de los grandes desventajas de los médicos, aunque las nuevas generaciones lo llevan mejor. Además, en los hospitales públicos hay mucha presión asistencial, con unas listas de espera que apremian. En el SCS se han hecho unas 12 intervenciones de cadera por artroscopia, mientras que en la Clínica Mompía (que es un centro de referencia en esta técnica) llevamos 135.
-Sin embargo, en el simposio se ha puesto de manifiesto que son numerosas las ventajas de esta metodología...
-Suponen un menor coste que las cirugía abierta clásica, entre otras cuestiones porque la recuperación es menor, se dan menos complicaciones, como infecciones, y el dolor que sufre el paciente disminuye considerablemente.
-Estas dos jornadas se centran en los últimos avances en cadera. ¿Defienden un diagnóstico y cirugía precoz para evitar los implantes?.
-Cada vez hay más personas afectadas por esta articulación, y no todas son mayores. El reto es reducir al mínimo el número de implantes de cadera. Existe una patología que no es muy conocida y por lo tanto no es fácil de diagnosticar. Se trata del choque fémoro acetabular. Es decir, la cabeza del fémur tiene una anomalía llamada giba que con el roce termina por rasgar el cartílago. Si se detecta a tiempo, se evitarán muchos implantes de cadera.
-¿Cómo se detecta esta patología?
-Con una simple radiología se puede descubrir. Luego hay que hacer más pruebas. En la gente joven se suele dar entre deportistas, tanto entre los de elite como los que no lo son. He operado a chicos desde los 18 años. Acuden a sus médicos con dolores en la cadera, que se agudizan cuando están sentados o adelantan la pierna.
-Pero no todos los facultativos llegan a este diagnóstico.
-Ese es el problema. Algunos ni siquiera aceptan que exista. Pero es algo ya muy habitual en EE UU y en países como Inglaterra o Alemania, no así en el sur de Europa. Sin embargo, está demostrado que un diagnóstico y una cirugía precoz detienen el deterioro de la cadera y pueden llegar a evitar hasta un 70% de las prótesis. Como es una cirugía aún muy joven (llevamos con ella unos seis o siete años), todavía no sabemos si con el tiempo acabarán también necesitando una prótesis, pero se habrán ahorrado muchos años por delante. Lo que está claro es que el 70% de los pacientes que tienen artrosis de cadera y que hay que reemplazarla, también tienen giba. De todas formas tenemos un país con muy buenos profesionales que cada vez están más al día de las nuevas técnicas. Se avanza rápido.
- Esta técnica también está teniendo mucho éxito en otras patologías relacionadas con la cadera...
-Gracias a la artroscopia se ha conseguido tratar muy bien la rotura del tendón gluteomediano, que estabiliza la pelvis al andar. Es una lesión que se da en mujeres, entre 50 y 70 años, que es muy dolorosa, sobre todo cuando se tumban. La técnica aplicada es parecida a la de la rotura de un tendón en el hombro.
© EL DIARIO MONTAÑES
Registro Mercantil de Santander, Tomo 723, Folio 165, Sección 8ª, Hoja S11607, Inscripción 1ª C.I.F.:B39495460
Domicilio social en C\ la prensa s/n, 39012 Santander , Cantabria. Correo electrónico de contacto internet.dm@eldiariomontanes.es
Copyright © Editorial Cantabria Interactiva S.L., Santander, 2008. Incluye contenidos de la empresa citada, del medio El Diario Montañés, y, en su caso, de otras empresas del grupo de la empresa o de terceros.
EN CUALQUIER CASO TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS:
Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación
pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en
cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización,
incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición
como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa
o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa.